En este libro, Michael Moore ofrece una crítica mordaz y humorística de la política estadounidense y la sociedad contemporánea. Con su estilo característico, Moore aborda temas como la corrupción política, las desigualdades sociales y el poder de las élites, utilizando el humor y la sátira para provocar la reflexión en el lector. El libro es una mezcla de manifiesto político y comedia irreverente, que invita a cuestionar el statu quo y a repensar el papel de los ciudadanos en la sociedad.