En 'El libro de los filósofos muertos', Simon Critchley explora las muertes de varios filósofos a lo largo de la historia, desde los presocráticos hasta figuras más modernas como Rousseau, Kant y Nietzsche. El autor examina las circunstancias de sus fallecimientos y las conecta con sus ideas centrales, reflexionando sobre el significado de una 'buena muerte' y cómo vivir con el conocimiento de la mortalidad. A través de breves entradas sobre cada filósofo, Critchley ofrece una perspectiva única sobre la filosofía y su relación con la vida y la muerte.