En la cuarta entrega de 'Una serie de eventos desafortunados', Violet, Klaus y Sunny Baudelaire son enviados a Paltryville para trabajar en un aserradero. Allí, descubren que el desastre y la desgracia acechan detrás de cada tronco. Los huérfanos Baudelaire se enfrentan a un gigante máquina de pinzas, una mala cazuela y un hombre con una nube de humo donde debería estar su cabeza. Además, un hipnotizador y un terrible accidente resultan en lesiones, y cupones.