En la Borgoña de 1808, una noche de verano, el joven viticultor Sobran Jodeau se encuentra con un ángel en su viñedo. Este encuentro marca el inicio de una serie de visitas anuales que, a pesar de los avatares de la historia mundial y la vida del pueblo, mejoran las cosechas. Una novela que explora la relación entre lo terrenal y lo celestial, la ambición y el amor, en un contexto histórico fascinante.