Todos somos culpables es una novela del autor español Alberto Vázquez-Figueroa, publicada en 2001 por Plaza & Janés. La trama sigue al detective Caetano Derederian, quien es contratado para investigar los sabotajes que sufre la multinacional Acuario & Orion. A través de una narrativa ágil, la novela invita a la reflexión sobre la desigualdad, la globalización y su relación con el terrorismo internacional. La historia se desarrolla en un contexto de intriga y suspense, manteniendo al lector inmerso en la investigación del detective.