Este exquisito libro abarca la madurez creativa de Mercè Rodoreda, una de las escritoras más importantes de la literatura catalana. La primera parte contiene diecinueve relatos de viajes a diversos pueblos, escritos por la autora a finales de los años setenta en Romanyà de la Selva, mientras terminaba su última novela, Quanta, quanta guerra... La segunda parte, 'Flors de debò', es una colección de treinta y ocho piezas que Rodoreda finalizó casi veinte años antes, en Ginebra, mientras escribía 'La plaza del Diamante', retomando así su carrera literaria tras la guerra y el exilio.