Descripción
Impresionante relicario de grandes dimensiones, con forma vegetal simétrica y estructura de retablo, elaborado en madera tallada y recubierta con estuco y pan de oro. En el centro se aloja una vitrina en forma de corazón, donde se conserva una reliquia ósea atribuida a San Dionisio, dispuesta sobre fondo de tela brocada roja y enmarcada por cordones dorados. La inscripción manuscrita “De San Dionisio” identifica claramente el contenido. La parte trasera conserva el cierre original. La pieza presenta una gran fuerza ornamental y un carácter devocional muy marcado.
Contexto hagiográfico: San Dionisio
San Dionisio fue el primer obispo de París y uno de los principales evangelizadores de las Galias en el siglo III. Martirizado por decapitación hacia el año 250, la tradición lo presenta como un céfalofo, capaz de portar su cabeza tras el martirio. Es venerado como patrón de Francia y de París, y su sepulcro en Saint-Denis se convirtió en necrópolis real. Las reliquias asociadas a su figura fueron muy apreciadas por su fuerza simbólica frente al martirio y la persecución.
Características
Época: Siglo XIX, probablemente segunda mitad (c. 1850–1880).
Iconografía: Reliquia ex ossibus de San Dionisio, mártir del cristianismo primitivo. La forma de corazón evoca tanto el amor divino como el sacrificio, en consonancia con la iconografía martirial.
Estilo o escuela: Barroco tardío popular con influencias rococó, reinterpretado en clave decimonónica. La talla, de hojas carnosas y simetría ascendente, se relaciona con la tradición gaditana y sevillana de relicarios ornamentales de altar o sacristía. La profusión de volutas, flores y palmetas denota un origen culto aunque popularizado.
Materiales: Madera tallada (probablemente pino), estucada y dorada al agua con pan de oro; cristal ; tela brocada roja; reliquia ósea; galón metálico fino y cartela manuscrita.
Medidas:
Estado de conservación: Buen estado general, aunque se observan pequeñas pérdidas de dorado y zonas de restauración visible en la parte posterior. El cristal está intacto y la reliquia perfectamente conservada y sujeta. La estructura es sólida y estable.