Chiclete no puede creerlo: ¡acaba de recibir por correo una caja de 5 kilos con 21.280 rompe-mandíbulas! Todo esto solo porque escribió una carta de queja a la fábrica de dulces. Esto, por supuesto, lo anima a escribir cartas y más cartas... ¡y las cajas de dulces no paran de llegar! En medio de tantos paquetes de dulces, ¿cómo iba Chiclete a ver ese sobrecito pequeño, escrito con una letra toda garabateada? Pero lo que Chiclete puede ver muy bien es que su mejor amigo, Webster, ¡está enojado como una onza! ¿Por qué será?