La Jude y su hermano gemelo Noah eran muy unidos. Cuando tenían trece años, Noah era un chico aislado que dibujaba sin parar y estaba enamorado del chico carismático de la casa de al lado. Jude, en cambio, era una chica atrevida, se lanzaba de acantilados, se pintaba los labios de rojo y hablaba por los dos. Tres años después, cuando tienen dieciséis, Jude y Noah apenas se dirigen la palabra, algo los ha destrozado trágicamente. Jude conoce a un chico arrogante y guapísimo con problemas, y algo más, una fuerza mucho más imprevisible que entrará a formar parte de su vida. Los primeros años son la historia que cuenta Noah, los de más mayores los cuenta Jude, pero lo que no ven los gemelos es que cada uno solo tiene media historia y que si pudieran reencontrar el camino que los une de nuevo, tendrían la oportunidad de rehacer su mundo. Esta es una novela juvenil que explora temas de amor, pérdida y reconciliación, con personajes complejos y una trama envolvente.