El cirujano Sam Gregory nunca esperó volver a ver a la matrona Molly Hammond en el hospital de Audley. En el pasado, Molly llevó en su vientre al bebé de Sam y su esposa, creando un vínculo especial entre ellos. Ahora que Sam está soltero, cree que su hijo, Jack, debería conocer a la mujer que lo gestó. Pronto, la conexión entre Sam y Molly se intensifica, surgiendo una atracción incontrolable. Sin embargo, Molly teme involucrarse demasiado, pues si algo sale mal, podría perderlos a ambos.