Mère et filles es una novela de Madeleine Chapsal que explora las complejas relaciones entre madres e hijas. La historia se centra en Antoinette, una viuda sexagenaria, y sus dos hijas, Eliane y Delphine. Cuando Antoinette sufre un problema cardíaco, Eliane la acoge en su casa, lo que desencadena una serie de rivalidades y celos entre las hermanas. A través de un mezcla de amor y odio, las hermanas se enfrentan por sus diferencias, gustos y formas de vida, mientras que los hombres en sus vidas no logran interponerse. La novela explora los lazos profundos e inquebrantables entre madres e hijas, así como las dificultades de vivir juntos.