En The Skin Collector, Jeffery Deaver nos presenta un thriller escalofriante donde el detective Lincoln Rhyme se enfrenta a un asesino en serie con un modus operandi único: tatuar mensajes en la piel de sus víctimas con veneno. La trama se desarrolla en Nueva York, donde Rhyme y su compañera Amelia Sachs deben descifrar las pistas dejadas por el asesino para evitar que siga cobrando vidas. La conexión con un caso pasado añade una capa de complejidad a esta historia llena de suspense y giros inesperados, manteniendo al lector en vilo hasta el final.